Algunos ejemplos de tratamientos estéticos para luchar contra la celulitis varían según el grado de la celulitis y de la flacidez.
Radiofrecuencia y ultrasonidos: la combinación de estas dos técnicas permite actuar en dos planos diferentes de la piel. Por una parte, provoca un calentamiento localizado en las capas más profundas de la piel afectadas, mientras que por otro lado enfría las capas superficiales para proteger las estructuras de la piel.
Criolipolisis: consiste en la destrucción de los adipocitos mediante la aplicación de frío por vía percutánea, sin ocasionar lesión de la piel.
Mesoterapia corporal: consiste en micro-inyección de vitaminas, minerales y oligoelementos que, aplicados directamente sobre las zonas afectadas, facilitan la eliminación de toxinas y grasa y líquidos.